Cuarta parte
Capitulo 2.
Alex agarró la mano de Leslie y
corrió con ella hacia la sala. Ella jadeo cuando se detuvieron y observó
sorprendida por una de las ventanas una columna de humo a lo lejos, tras los
árboles y otras casas. También notó sorprendida como las ventanas de la casa
frente a la suya bajaban unas persianas grises y metálicas. Su propia casa hizo
exactamente lo mismo, dejándola en la oscuridad.
—Alex —jadeo asustada.
—Calma —dijo él tenso, Leslie
parpadeo cuando las luces se encendieron cegándola unos segundos.
Cuando logró ver notó que Alex
estaba a su lado y observaba la televisión, cambiaba los canales rápidamente.
Se acercó a él enseguida, Alex la rodeo con un abrazo.
—¿Qué fue eso? —murmuró aun
sorprendida —y no sabía que la casa hiciera eso.
—Todas las casas fueron modificadas
hace unos meses —murmuró él sin mirarla, lo observó. Luego de uno segundos él
giró su rostro hacia ella y al verla palia la abrazo contra su pecho—. Calma,
aquí estaremos bien. No sé lo que habrá pasado pero lo averiguaré. Las casas
tienes un sistema de seguridad que cierra las ventanas y traba las puertas.
Solo los que tienen la tarjeta de acceso pueden entrar o salir de las casa.
—¿Tarjeta de acceso? —estaba
confundida —¿Qué tarjeta?
—Estaba sobre uno de los veladores,
la deje allí el primer día que llegaste —él arrugó su frente —¿no la viste?
—ella negó enseguida —bien, te daré otra entonces.
Leslie miró alrededor.
—Esto es un poco perturbador
—susurró.
Alex suspiró.
—Lo sé, encerrados en tu propia
casa—. Ella asintió y miró la televisión.
Ambos se sentaron a esperar alguna
noticia, y Leslie secretamente creía que en cualquier momento escucharía otra
explosión. Cuando se hizo de noche y Alex le dijo que fuera a dormir se negó
aduciendo que quería ver a Yerie, y en verdad lo quería pero también tenía miedo.
Supo que se había quedado dormida
cuando oyó la voz de Yerie acercarse.
Leslie abrió los ojos y alzó su
cabeza del muslo de Alex. Quien se puso de pie enseguida para atraer y abrazar
a Yerie. Los observó unos segundos hasta que Yerie la miró y estiró una mano
hacia ella. Leslie la tomó y de un empujón se encontró entre los dos. Suspiró.
—¿Estas bien? —dijeron los tres al
mismo tiempo. Leslie rio y los demás sonrieron.
—Yo estoy bien —dijo Yerie y los
miró a ambos, se alejó apenas un poco.
—Bien —dijo Alex, ella asintió
—solo fue el susto. Y no han dicho nada en televisión.
Él suspiró.
—Lo sé, me enteré hace unas horas,
no quieren que se informe hasta que sepan quien lo hizo.
Los tres se movieron hacia la
cocina.
—¿Sabes qué paso? —le preguntó
Leslie.
Yerie la miró y luego se sentaron,
Alex se movió hacia la cocina para cocinar, casi automáticamente.
—No es mucho en verdad, solo pude
averiguar que fue un automóvil el que exploto.
Alex arrugó su frente y lo miró
enseguida.
—Lo sé —dijo Yerie.
—¿Qué? —preguntó ella.
—Es muy extraño que pase eso —le
explicó él —no hay nada en un automóvil que pueda explotar en verdad, a lo más
la batería podría dejar de funcionar pero incluso eso es raro.
—Entonces alguien lo hizo explotar
—murmuró ella, asintió.
—Sí, eso creen todos.
—¿Saben de quien era el automóvil?
—preguntó Alex.
—sí, de uno de los generales.
—¿Cuál? —preguntó Leslie enseguida,
ella solo conocía a uno y…
—El general Gutter.
Y fue a él, pensó
sombríamente.
—¿Está bien?, sabes si le paso
algo…
Él levantó ambas manos enseguida al
oírla preguntar rápidamente.
—Está bien, aun no subía a su
vehículo, este explotó incluso antes de que se acercara demasiado, solo tiene
un moretón por lo que se.
—No sabía que él vivía cerca.
Yerie negó.
—No, él visitaba a alguien cuando
pasó.
Todo el mundo guardo silencio un
segundo después. Leslie solo observó a Alex moverse por el lugar tan perdido en
sus pensamientos que por un segundo temió que pudiera cortarse.
—Es increíble —dijo ella —ni
siquiera en la tierra había estado tan cerca de una explosión.
Yerie tomó sus manos y le sonrió
con suavidad.
—Aquí las cosas son más
interesantes, le dan un sabor a la vida, ¿no?—ella rió al oírlo, Yerie también
sonrió a un más.
***
Luego de comer y observar la
televisión, Leslie observó a Yerie a su lado que observaba a Alex con cierta
intensidad. Cuando él notó que lo observaba se giró hacia ella y le sonrió.
—¿Quieres ir a dormir? —preguntó él
con suavidad y acaricio su rostro.
—No —susurró, sintió la mirada de
ambos fijamente en su rostro —quiero verlos a ustedes.
Yerie arrugó su frente un segundo y
luego observó a Alex, ella también lo hizo y notó la expresión de su rostro, un
tanto sorprendido y otro confundido.
—En verdad lo quiero —murmuró, y
era verdad. Ni siquiera sabía que le había llevado a decir eso.
—¿Estas segura? —preguntó Alex
tenso. Asintió y tragó.
Sí, claro que estoy segura, pensó,
y más que eso en verdad.
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