miércoles, 23 de julio de 2014

La fantasía de Leslie. Primera parte, Capitulo 7.


Primera parte
Capitulo 7
Leslie asintió y observó a ambos hombres unos segundos. La expresión de Yerie era tranquila, amable y atenta, ella tenía toda su atención. En cambio con Alex, se sentía como si fuera a ser interrogada, su rostro estaba impasible frente a ella, serio y de cierta manera vacío, alejado. El solo la observaba fijamente, esperando su respuesta.
Suspiró al darse cuenta de que esta conversación era más que necesaria.
—El General me dijo que ambos eligieron ser mis asignados.
Yerie asintió.
—Sí, a ambos se nos preguntó si lo deseábamos —Yerie observó a Alex unos segundos—, cuando se nos informo de tu…—él pareció pensar en una palabra adecuada para describir el hecho de que no podía tener hijos.
Le ayudó.

—Condición.
Él la miró y asintió.
—Se nos preguntó si deseábamos ser tus asignados.
—Bárbara me contó que los asignados son elegidos para una mujer, ¿ustedes fueron elegidos de la misma forma?
Los observó a ambos.
—Lo fuimos —dijo Yerie tranquilamente—, pasamos por el mismo proceso que todos los hombres que son asignados.
—Ya veo —murmuró ella.
—Leslie —continuó él —sabemos que no puedes tener hijos —ella se tensó —y debes saber que eso no nos importa, aun así podemos formar una familia.
Ella lo observó a los ojos sorprendida. El mensaje había sido tan claro y directo que aún no lograba analizarlo del todo. Y cuando lo hizo, dudo enseguida de sus palabras. Eso sí importaba, se dijo, se lo habían dicho, varias veces. Se lo habían repetido de forma cruel.
Solo sirves para ser bonita, recordó y evitó estremecerse.
Ella tomó aire dos veces y se concentró en el presente, en esos dos hombres que seguían observándola fijamente.
—¿Qué pensaron cuando se los dijeron?
Los estudió con la misma intensidad de ellos. Sabía que no podía ser tan bueno como aparentaba. No por siempre por lo menos.
—Nos sorprendimos —contestó Alex, lo observó enseguida.
—Se sorprendieron de ser asignados a una mujer como yo.
Yerie arrugó su frente y miró a Alex un segundo.
—Nos sorprendimos por ti, por lo que significaba para ti eso y más en este lugar —dijo Yerie y suspiró —debe ser más difícil para ti aquí que en la tierra…
—No me tengas lastima —soltó enseguida, odiaba eso, mucho en verdad.
Eso pareció descolocar a Yerie, que la observó unos segundos sin saber que decir.
—No se puede evitar sentir pena o lastima —dijo Alex, ella apretó los labios —solo no le des una connotación negativa.
—Bueno, esto es lo que pasa —murmuró ella—, jamás seré madre y ustedes aun así aceptaron esto sabiendo que nunca serán padres—. Leslie marcó la palabra nunca con su voz, mirándolos fijamente. Yerie solo la observó y Alex apretó los labios un segundo.
Ella deseaba conocerlos pronto, pero en verdad, no ver solo lo bueno en un principio y enterarse después de la realidad. Con una vez en su vida era más que suficiente.
Yerie suspiró.
—Es comprensible que desconfíes de nosotros —ella se sorprendió al oírlo. No supo que decir. Pero al ver que él se ponía de pie y llegaba a su lado, casi se congelo sobe la silla.
Ella empujó un poco la silla hacia atrás cuando Yeire llego más cerca,  lo vio agacharse antes de hablar.
—Debes entender que aceptamos esto porque nos gustaste a ambos, porque deseamos conocerte y formar una familia contigo, los tres—. Él observó a Alex un segundo, que seguía en silencio. Cuando Yerie alzó su mano y tomó la suya con suavidad casi se estremeció. —Esto no será un momento, no es curiosidad, ahora somos tu familia. No nos vamos a arrepentir mañana, sabíamos al aceptar esto que será para siempre y lo hicimos.
Ella siguió observándolo hasta que asintió suavemente, no sabía que mas decir.
—Entiendo —murmuró, él había sido bastante directo, pensó. Pero aun así, eso se vería en el futuro.
Leslie observó a Alex un segundo y luego a Yerie.
—Deseo saber cómo resulta esto —dijo y suspiró, era la verdad. Luego sonrío suavemente —quiero conocerlos, a ambos—los miró —y que esto llegué a buen puerto.

—Lo hará —dijo Yerie y se levantó—, si así lo deseas todo saldrá bien.

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